Alianza contra el Hambre y la Pobreza avanza, pero el acceso a los recursos aún es un desafío

Presidencia brasileña del G20 innova al hacer que países ricos se comprometan en la Alianza para la erradicación del hambre, pero el acceso a fondos de financiamiento ya existentes aún es un desafío. La cooperación técnica e implementación de experiencias de éxito de los países del G20 forman parte de la estrategia de la Fuerza de Tarea. La expectativa es alcanzar buenos resultados antes del 2030

Las discusiones para la construcción de una Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza avanzan hacia la construcción de un conjunto de políticas con base en una serie de criterios y en los ajustes de los términos de adhesión. Wellington Dias, ministro del Desarrollo y Asistencia Social, Familia y Combate al Hambre (MDS), afirmó estar satisfecho con el debate realizado en la segunda reunión de la Fuerza de Tarea de Combate al Hambre y a la Pobreza, este viernes (22), en Brasilia.

Según el ministro, la presidencia brasileña del G20 innova al hacer que países ricos prioricen una alianza para la erradicación del hambre. “Los países más desarrollados pueden colaborar con aquellos en desarrollo con conocimiento y recursos financieros. Y la expectativa es que podamos alcanzar buenos resultados antes del 2030”, afirmó. Entre las experiencias brasileñas que pueden entrar en la cesta de políticas a ser compartidas con otros países, el ministro citó el Programa Bolsa Familia, el Programa Nacional de Alimentación Escolar (PNAE) y el Registro Único.

Acceso a fondos ya existentes

No obstante, el desafío del combate al hambre es complejo y no puede basarse en una solución simplista como, por ejemplo, la creación de un único nuevo fondo. Renato Godinho, jefe de la Asesoría Especial de Asuntos Internacionales del MDS, llama la atención para el hecho de que ya existen varios fondos de apoyo al combate a la pobreza en el mundo. El problema es que los países quieren implementar mecanismos en larga escala, como el Programa Bolsa Familia, por ejemplo, y no logran articular esta ayuda. “La alianza trae la propuesta de articular de una mejor forma todos los fondos existentes, las varias soluciones, y, al mismo tiempo, movilizar para que haya más recursos y nuevas soluciones”. Por eso es importante que se trabaje en conjunto con el Canal de Finanzas.

Débora Freire, subsecretaria de Política Fiscal de la Secretaría de Política Económica del Ministerio de Hacienda, concuerda que el tema de la erradicación del hambre atraviesa varias áreas de estudio y es crucial alinear el trabajo de los dos canales del G20 – Canal de Sherpas y Finanzas. “Está muy claro en los grupos de trabajo del Canal de Finanzas que la erradicación del hambre en el mundo es una forma de que los países, sobre todo naciones de baja renta, ganen productividad y mejores resultados económicos”, evalúa la subsecretaria de Política Fiscal.

La Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza trabaja con tres pilares: el nacional, el conocimiento y el financiero. Una vez adhiriendo a ella, los países hacen un compromiso para utilizar conocimientos específicos de instituciones especializadas utilizando una gama de opciones de financiamiento para implementar las políticas públicas.

La reunión de la Fuerza de Tarea de Combate al Hambre y a la Pobreza contó con la participación de 53 delegaciones de los países miembros del G20, países invitados y diversos organismos internacionales, entre ellos la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef). El grupo busca establecer las bases técnicas y negociar las principales características para un mecanismo práctico de implementación de buenas políticas internacionales contra el hambre y la pobreza. La próxima reunión será entre los días 22 y 24 de mayo en Teresina, en Piauí.

Intercambio de experiencias

Dentro del espíritu de intercambio de experiencias, después de la reunión, parte del equipo fue a conocer una escuela y una propiedad rural de Brasilia que participa del Programa Nacional de Alimentación Escolar (PNAE). El programa proporciona alimentos producidos por la agricultura familiar para 144 mil escuelas y alimenta a cerca de 40 millones de niños y adolescentes diariamente en todo país.