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La Cumbre del G20, que Japón acogió por primera vez en Osaka en 2019, contó con la participación de miembros del G20, 8 países invitados y representantes de 9 organizaciones internacionales, y fue históricamente la mayor Cumbre jamás celebrada en Japón. Los líderes de los principales países se reunieron para identificar un terreno común, y para lidiar conjuntamente con las principales cuestiones relacionadas con la economía mundial. En medio del malestar y la insatisfacción mundiales derivados de los cambios que acompañan a la globalización, Japón asumió el liderazgo de la Presidencia, asegurándose de que el G20 expresara un mensaje firme al mundo a través de la Declaración de los Líderes del G20 de Osaka, que incluye diversas áreas como liderar el crecimiento económico mundial mediante la promoción del libre comercio y la innovación, y abordar las desigualdades, así como contribuir a resolver los retos medioambientales y globales.

Argentina asumió la presidencia del G20 del 1 de diciembre de 2017, hasta el 1 de diciembre de 2018 cuando concluyó la Cumbre de Líderes en la Ciudad de Buenos Aires.  El país pudo encontrar consensos en temas sensibles como el comercio internacional, el exceso de capacidad siderúrgica, así como el rol del Acuerdo de París en materia de cambio climático, y la forma en que debe abordarse la Agenda 2030.

En el marco del lema "Construyendo consensos para un desarrollo equitativo y sostenible", estos temas fueron estratégicos en el G20 2018 y definieron tres prioridades que impregnaron la agenda de la presidencia argentina: "el futuro del trabajo", "infraestructura para el desarrollo" y "un futuro alimentario sostenible". La agenda del G20 tuvo como eje central a las personas. Asimismo, la perspectiva de género fue otro de los temas que Argentina impulsó y fue estratégico y transversal en los distintos grupos de trabajo del foro.

Argentina trabajó en todo momento en el G20 con la intención de promover la perspectiva de los países en desarrollo y con el objetivo de dar a la reunión una visión más amplia e inclusiva.

Bajo el lema "Dando forma a un mundo interconectado", el G20 de Hamburgo (2017) priorizó y allanó el camino para una cooperación multilateral tangible en cuestiones clave. El G20 demostró una notable clarividencia en materia de preparación frente a pandemias y resistencia a los antimicrobianos, y estableció la Alianza del G20 con África, incluido el Pacto con África, centrado en inversiones y oportunidades sostenibles.

En la reunión del G20 en Hamburgo se adoptaron nuevas iniciativas, como el Plan de Acción de Hamburgo sobre el Clima y la Energía para el Crecimiento, con miras a la aplicación del Acuerdo de París, y la Actualización de Hamburgo, para aplicar la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

Además, el G20 reafirmó el sistema de comercio multilateral basado en normas, incluido el compromiso renovado con las cadenas de suministro sostenibles y la lucha contra el exceso de capacidades; reforzó las capacidades de lucha contra el terrorismo a través de la Fuerza de Tarea sobre Acción Financiera; dio pasos concretos hacia el logro de la igualdad de género a través del empoderamiento de las mujeres (incluidas iniciativas como #eSkills4Girls y la Iniciativa de Financiamiento para Mujeres Emprendedoras, diseñada para ayudar a las mujeres de los países en desarrollo a crear sus propias empresas), y destacó la necesidad de abordar las causas subyacentes de los desplazamientos y las necesidades de los refugiados y los migrantes.

Los días 4 y 5 de septiembre de 2016 se celebró en Hangzhou, China, la XI Cumbre del G20. El tema fue "Hacia una economía mundial innovadora, vigorizada, interconectada e inclusiva". Los participantes mantuvieron amplios debates sobre cuatro puntos clave del orden del día: abrir una nueva senda para el crecimiento, una gobernanza económica y financiera global más eficaz y eficiente, un comercio y una inversión internacionales sólidos, y un desarrollo inclusivo e interconectado.

Coincidiendo con una coyuntura crucial para el crecimiento económico mundial y la transformación del G20, la Cumbre de Hangzhou concluyó con la adopción del Comunicado de la Cumbre de Hangzhou de los Líderes del G20 y 28 documentos finales. Los resultados reflejaron el espíritu de trabajar juntos para afrontar los retos y trazaron el rumbo de la economía mundial. La aprobación de planes de acción pragmáticos como el Plan de Acción del G20 sobre la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y la Estrategia del G20 para el Crecimiento del Comercio Mundial reflejaron el compromiso con el desarrollo común.

La Cumbre de Hangzhou transmitió este mensaje a la comunidad internacional: El G20 no solo sirve a sus miembros, sino también al mundo en general, especialmente a los países en desarrollo y a su población.

Turquía ocupó la presidencia del G20 en 2015 y acogió la Cumbre de Líderes en Antalya los días 15 y 16 de noviembre de 2015. La presidencia turca del G20 pretendía centrarse en el desarrollo de un crecimiento mundial más integrador, la mejora de las inversiones y el cumplimiento efectivo de los compromisos previos. Por ello, Turquía definió las prioridades de su presidencia del G20 con tres I: "Inclusión, Inversión e Implementación".

La Cumbre de Líderes reunió a representantes de 26 países y siete organizaciones internacionales, con 13.000 participantes.

El primer día de la Cumbre, los Líderes asistieron al almuerzo de trabajo sobre "Desarrollo y Cambio Climático", a una sesión titulada "Crecimiento Inclusivo: Economía Global, Estrategias de Crecimiento, Empleo e Inversión" y la cena de trabajo sobre "Retos Globales: Terrorismo y crisis de los refugiados".

En la sesión titulada "Aumentar la resiliencia", los líderes debatieron sobre la normativa financiera, la tributación internacional, la lucha contra la corrupción y la reforma del FMI. El comercio y la energía encabezaron el orden del día del almuerzo de trabajo en el que se adoptaron el comunicado final de la Cumbre y el Plan de Acción de Antalya.

La Cumbre del G20 2014 de Australia se celebró en Brisbane los días 15 y 16 de noviembre. La Cumbre obtuvo resultados en los tres temas de la agenda: (i) crecimiento y empleo, (ii) resiliencia económica y (iii) fortalecimiento de las instituciones globales.

Los líderes de la Cumbre de Brisbane debatieron los principales retos económicos mundiales y las estrategias para el crecimiento económico. El G20 se comprometió a aumentar su PIB más de un 2% en cinco años. También acordó impulsar el crecimiento y crear empleos de calidad, tal y como se establece en el Plan de Acción de Brisbane y en las estrategias de crecimiento asociadas.

Los líderes acordaron también aumentar la inversión en infraestructuras mediante la creación de un Global Infrastructure Hub mejorar la colaboración energética, reforzar los mercados energéticos a través de los Principios del G20 sobre Colaboración Energética, y reducir la brecha entre las tasas de participación laboral de hombres y mujeres en un 25% para 2025 a través del Objetivo de Brisbane. Los líderes acordaron también reformas para reforzar la normativa financiera y combatir la evasión fiscal. La Cumbre dio lugar a un Comunicado de los Líderes, el Plan de Acción de Brisbane y una declaración independiente sobre el ébola.

La 8ª Cumbre del G20 se celebró en San Petersburgo (Rusia) los días 5 y 6 de septiembre de 2013.

Los principales temas propuestos para el examen de la cumbre fueron: la aplicación del Acuerdo Marco para un Crecimiento Sostenible, Fuerte y Equilibrado; la creación de empleo; la reforma del sistema monetario y financiero internacional; la reforma de la regulación y supervisión financieras; el desarrollo sostenible de los mercados mundiales de la energía; la promoción del desarrollo internacional; el fortalecimiento del comercio multilateral; la lucha contra la corrupción.

En cuanto a los objetivos de la presidencia rusa del G20, decidió no introducir ningún punto nuevo en la agenda, sino concentrarse en la vía tradicional de apoyo a un crecimiento sostenible, integrador y equilibrado y a la creación de empleo en todo el mundo. Rusia se concentró en la coordinación de las medidas políticas que podrían adoptarse para estimular la expansión y el desarrollo de las fuentes de crecimiento de la inversión a largo plazo, así como en el debate sobre el futuro de los empréstitos soberanos en el contexto de los compromisos nacionales con un conjunto de normas internacionales acordadas.

Con el fin de garantizar la continuidad y la aplicación de los compromisos anteriores, Rusia se centró en trabajar con sus socios para avanzar en los temas tradicionales de la agenda del G20, como el estado de la economía mundial, la aplicación del Acuerdo Marco para un Crecimiento Fuerte, Sostenible y Equilibrado, la facilitación de la creación de empleo, la reforma de los sistemas de regulación y supervisión monetaria y financiera, incluida la reforma de la fórmula y las cuotas del FMI, así como el mantenimiento de la estabilidad en los mercados energéticos mundiales, la intensificación del desarrollo internacional, el fortalecimiento del comercio multilateral y la lucha contra la corrupción.

México asumió la presidencia del G20 en 2012 con el objetivo de lograr un sistema de gobernanza económica global más eficaz, considerando los intereses y prioridades de los países emergentes y en desarrollo.

Las prioridades de la presidencia mexicana fueron la estabilización económica y las reformas estructurales para el crecimiento y el empleo; el fortalecimiento de los sistemas financieros y la promoción de la inclusión financiera para impulsar el crecimiento económico; la mejora de la arquitectura financiera internacional en una economía global interconectada; el refuerzo de la seguridad alimentaria y la mitigación de la volatilidad del precio de las materias primas; así como la promoción del desarrollo sostenible, del crecimiento verde y de la lucha contra el cambio climático.

La sexta Cumbre de Líderes del G20 se celebró los días 3 y 4 de noviembre de 2011 en Cannes (Francia). Los jefes de Estado y de Gobierno adoptaron planes de acción en los ámbitos de la volatilidad de los precios agrícolas y para el crecimiento y el empleo. También se debatieron temas como la seguridad alimentaria, la regulación bancaria y financiera, la lucha contra la corrupción y la prevención del cierre de los mercados nacionales. La cuestión de las consecuencias sociales de la globalización se añadió a la agenda del grupo.

La quinta Cumbre del G20 se celebró los días 11 y 12 de noviembre de 2010 en Seúl. Durante la cumbre, los líderes propusieron soluciones para evitar el aumento del proteccionismo comercial y las políticas de manipulación de los tipos de cambio. También acordaron reformar el sistema de cuotas y el directorio ejecutivo del FMI; crear un marco para promover el crecimiento sostenible; nuevas normas sobre regulación bancaria e instituciones financieras de importancia sistémica; y líneas de crédito para situaciones de emergencia.

La Cumbre del G20 se celebró los días 26 y 27 de junio de 2010, en un momento de recuperación económica en la mayoría de sus miembros. Los líderes del G20 abordaron el reto de combatir el desempleo persistente y los efectos persistentes de los años de crisis anteriores. Entre los resultados de la presidencia canadiense destacan el establecimiento de recomendaciones de política macroeconómica para grupos de países dentro del Marco para un Crecimiento Fuerte, Sostenible y Equilibrado y la inclusión en la agenda de la lucha contra la corrupción.

La segunda Cumbre del G20 se celebró en Pittsburgh (EE.UU.) los días 24 y 25 de septiembre de 2009. En esa ocasión, los líderes consolidaron el G20 como mecanismo permanente y "principal foro de cooperación económica internacional" entre sus miembros. Se creó un marco para un crecimiento fuerte, sostenible y equilibrado. También se tomaron decisiones para reforzar el sistema de regulación financiera internacional, modernizar las instituciones internacionales para que reflejen la nueva economía mundial y reformar el mandato, la misión y la gobernanza del FMI y los bancos de desarrollo. Además, los líderes debatieron medidas en los ámbitos de la seguridad energética y el cambio climático. Por último, los miembros del G20 se comprometieron a apoyar a los más vulnerables y a situar el empleo de calidad en el centro de la recuperación económica, promoviendo una economía mundial abierta.

Durante la Cumbre de Londres del 2 de abril de 2009, los líderes del G20 se reunieron para debatir acciones colectivas destinadas a restaurar la confianza de los agentes económicos; reforzar la regulación; financiar a las instituciones financieras para superar la crisis y evitar que se repita; promover el comercio y los flujos de capital; evitar el cierre de los mercados, sentando las bases para una reanudación sostenible e integradora del crecimiento y el empleo.